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Con el auge de la economía digital, la formación online ha cobrado fuerza y se impone cada vez más, como el mecanismo idóneo por el alcance, calidad y eficiencia que brinda a las empresas que utilizan esta modalidad.
En este ámbito, aparece la figura del tutor virtual como un factor importante dentro del proceso de formación utilizado en la mayoría de las empresas a nivel mundial.
¿Cuál es el rol de este personaje?, ¿es un experto académico capaz de responder las preguntas más difíciles o es un acompañante del proceso que motiva al participante a seguir, avanzar y culminar su formación?
La respuesta no es definitiva, sin embargo, debido al crecimiento de la cultura digital y la optimización constante de las plataformas de formación online, el rol del tutor es cada vez más el del acompañarte motivador y no el de un académico experto.
Con el avance de la tecnología, los cursos online, son diseñados por expertos en diseño instruccional que combinan técnicas web, didáctica online y experiencia de usuario, para que sean los participantes los que avancen a su propio ritmo y logren la mayor eficiencia en el proceso de aprendizaje.
En esa medida, el impacto del tutor visto como un experto académico se ha minimizado, tomando protagonismo el tutor acompañante y motivador. Los estudios recientes, ratifican que el participante valora profundamente estar acompañado, que le motiven y que le alienten a culminar el proceso de capacitación.
Es por lo descrito con anterioridad, podemos afirmar, que el rol del tutor ha variado, ha evolucionado dándole mayor protagonismo a la conversación cercana, tal y como ocurre en situaciones cotidianas como una conversación por redes sociales o por algún grupo de WhatsApp.
Alejandro Rivera Prato | Director Formación2.0